viernes, 1 de agosto de 2008

Volver a nacer

Llevo ya varios días, algunas semanas incluso con la mente puesta en contar algo muy personal pero que deseo compartir con todos los que visitáis ésta humilde bitácora. Los que me conocéis sabéis de que va la historia pero la contare de todos modos.

Escribir sobre algo tan impactante como sentir que uno a vuelto a la vida, que ha vuelto a nacer no es fácil, pero no es fácil ya de por si asimilar lo vivido ni tan siquiera la cantidad de ideas, situaciones y emociones que se te pasan por la cabeza en la soledad de un hospital, en una cama de la UVI...

El dos de junio de este año regresaba junto con varios componentes del Handisport de estar en Mallorca en los Campeonatos de España por equipos, competición en la que nos fue muy bien por cierto. El día anterior en un despiste tuve una caída y me dañe la rodilla hasta el punto en que no podía caminar y me puse bastante nervioso ya que me dolía bastante. A su vez mi respiración se empezó a acelerar pero no le di mayor importancia pues lo achacaba a los nervios y la ansiedad de la caída y el dolor de la rodilla. Pero una vez en casa mi madre al verme decidió llevarme a Urgencias ya que no veía normal mi respiración y yo me seguía quejando de la rodilla.

Una vez en el Hospital decidieron dejar de lado la rodilla ya que la situación respiratoria no era nada buena hasta el punto que hacia las 10 y pico de la noche decidieron ingresarme en la UVI del Instituto Nacional de Silicosis (centro de referencia nacional para las patologías pulmonares). Allí pase la noche con oxigeno por mascarilla y también el día 3, pero mi situación no mejoraba sino que empeoraba por lo que el día 4 deciden ponerme respiración asistida ya que la frecuencia de mi respiración era tan alta que corría cierto riesgo, para ello deciden sedarme. Pasé bajo sedación unos 12 días durante los cuales surgieron algunas complicaciones de gravedad pero que rapidamente fueron superadas. Tenia una neumonía grave.

Pasados esos 12 días y ya con la conciencia recuperada estoy otros 3 días completos con respirador y al 4º me lo quitan. El momento de quitármelo para mi fue algo emocionante, yo me encontraba bien sin problemas para respirar ni nada y por ello con fuerzas, pero a su vez se daba la triste circunstancia de que la persona que compartía box conmigo fallecía esa misma mañana y la verdad que a uno le impactan esas cosas ya que yo estaba alegre, me sentía vital y a menos de 5 metros alguien acababa de perder la vida.... es algo que creo me quedara para siempre en la memoria.

Los demás días ya fueron una continua mejoría y el día 21 (sábado) me trasladan a una planta para darme el alta el día 25 de junio. Tras ese día estuve acudiendo a hacer rehabilitación ya que mi cuerpo quedo muy debilitado muscularmente por la cantidad de días sedado. Actualmente ya estoy recuperado y estoy llevando una vida normal e independiente como lo hacia antes de pasar por esto.

Uno después de todo esto se queda sin palabras con las que agradecer a las personas que han estado a mi lado y al lado de mis padres que son los que más lo han sufrido, por sus palabras de ánimo, su apoyo y las innumerables visitas que a lo largo de tantos días de incertidumbre estuvieron siempre pendientes. Familiares venidos desde lejos solo para estar un rato con mis padres o pasar a verme aunque estuviera dormido o con el tubo respiratorio sin poder hablar. Gracias a mis amigos que también estuvieron pendientes y atentos, algunos que estan lejos de aqui se esforzaron para hcerme llegar sus ánimos; a mis compañeros de natación, mi entrenador, que participaron en el I Open de la Región de Murcia estnado yo ingresado y consiguieron nada menos que 19 medallas...

Pero si a algunas personas les debo agradecer enormemente mi recuperación es a la doctora Carmen Pascual y a todo el equipo de ATS y auxiliares de la UVI de Silicosis ya que sin su grandioso esfuerzo día a día nada habría sido posible, a todos ellos los llevare siempre en mi corazón.

A todos GRACIAS.

Volver a nacer era una sensación extraña para mi, hasta dudaba realmente de que existiera esa sensación realmente pero una vez pasado por esto que os he relatado os aseguro, queridos lectores, que es una sensación indescriptible y que personalmente me ha llenado de fuerzas para seguir luchando por vivir, por las cosas en las que creo y por lo que quiero. Vivir es algo maravilloso y la vida nos puede dar palos pero nunca debemos de dejar de querer vivir ya que la vida nos tiene preparados un monto de momentos maravillosos, montones de personas maravillosas a las que conocer y con las que compartir alegrías.